domingo, 23 de mayo de 2010

TORMENTA EN EL VASO

TORMENTA EN EL VASO

Vivimos en un mundo dialéctico; de contrastes, de contraposiciones o contrapuestos, aparente e ilusorio, donde necesitamos parámetros para discernir.. Por eso, muchas veces no distinguimos las proporciones y creemos que un soplo es un huracán; hasta que podemos ver en perspectiva y observamos qué ridículos hemos sido al cacarear ante nada. A veces, una vacilación nos parece un terremoto. Y luego, gracias a Dios, Él nos muestra la medida, y nos revela la verdad. El Señor debe ser la medida para todo. No debemos apartar nuestros ojos de él, asémonos fuertemente de su túnica y cuando podamos alcanzarlo, de su brazo. Que él nos sostenga y nos estire fuera del mar borrascoso al que caemos por nuestra falta de fe, por nuestras dudas, como Pedro.

Utilizando siempre nuestro limitado pensamiento dialéctico, puedo ver mi fe, cuando me encuentro ante personas carentes de Cristo. Así, puedo verte a vos en mi vida y cuánto confío en vos.

SEÑOR:
Sé que sos mi baluarte y mi sostén. CONFÍO EN VOS SEÑOR, con todo mi corazón, con toda mi alma y con toda mi mente. Confío en Vos, Señor y te amo. Sé que tienes un propósito para mí. Sé que me tienes fuertemente asida de mi brazo derecho y me conduces con firmeza. NO ME SUELTES SEÑOR. ¡Te lo suplico por tu Madre María!.
Sé que me hablas todo el tiempo, y que tu amor me reconforta. Sé que me sostienes en tu mano, y que si estás conmigo, nada ni nadie puede contra mí si estás conmigo. Porque te temo Señor, y sos mi protección. Porque me dijiste Señor, que si estás conmigo ¿qué temeré?.
Gracias, Señor.
MLF/mlf  mayo 2010

No hay comentarios: